Ya es posible utilizar la energía solar para generar frío

Diversos estudios demuestran que con esta fórmula se podría llegar a ahorrar en torno a un 80% de energía. 

En la actualidad, entre el 20 y 25% de la energía consumida dentro del hogar, se destina íntegramente a la climatización. Este gasto, que dispara la factura mensual y al mismo tiempo afecta de manera negativa al medio ambiente, puede reducirse de manera considerable con el sol como concepto base. Aquí irrumpe lo que los profesionales definen como frío solar.

Se trata de un sistema que utiliza la energía solar, no para calentar el espacio, sino para enfriarlo. Se trata, por lo tanto, de aprovechar el calor para generar frío. Durante los meses de verano y con el cambio climático, el consumo eléctrico se dispara a causa de los aparatos de aire acondicionado. Por lo tanto, la popularización del frío solar podría suponer un desarrollo idóneo en la implantación de energías renovables para refrigerar los espacios

El funcionamiento de las instalaciones de refrigeración solar parecido al de la generación de calor a través de las energías renovables. Primero, se capta la energía solar mediante el sistema elegido, como paneles solares o calderas de biomasa. Luego, se almacena la energía que sirve de fuente de alimentación para el sistema encargado de producir frío. El siguiente paso es la distribución de la energía en forma de frío. Por regla general, se utiliza un circuito radiante instalado en el suelo o el techo. Ya por último, la máquina que produce el frío realiza lo que se conoce como circuito de disipación. Esto es, capta el calor de dentro del edificio para emitir frío.

La capacidad de almacenar energía solar térmica es clave para poder proporcionar de forma continua una energía que se almacena de forma fluctuante, como es la solar. Aunque es necesario recalcar que lo que se almacena no es energía térmica exactamente, pues no se conserva en forma de calor, sino que se transforma en energía química.

Fuente: lavozdegalicia